¿Qué es un testamento abierto?

Actualmente las personas somos más conscientes de la importancia de dejar por escrito el destino de nuestros bienes y patrimonio cuando fallecemos. Por ello un testamento resulta ser la mejor opción para que nuestra voluntad se cumpla y para que nuestros familiares o allegados se beneficien de lo que dispongamos mediante este acto tan personal e íntimo.

En particular, el testamento abierto es una de las herramientas más usadas con este objetivo, por lo que es importante conocer de qué se trata, cómo se diferencia de otras modalidades de testamento y cómo se debe hacer para que todo marche sin preocupaciones cuando el momento de nuestra partida llegue.

¿Qué significa que el testamento está abierto?

Un testamento abierto es aquel que se otorga ante Notario y que recoge la última voluntad del causante, ya sea de forma oral donde el Notario hace de transcriptor o a través de un escrito que entrega de su puño y letra o redactado por el abogado experto en herencias en su calidad de asesor legal.

Las personas que validan el otorgamiento de testamento abierto no tienen porqué ser un Notario. El Código Civil establece que otras figuras como agente diplomático, testigos, oficial del ejército y capitán de navío pueden autorizar el acto y reconocerlo como válido.

Diferentes tipos

Los testamentos abiertos se dividen en ordinarios y extraordinarios:

• Testamento abierto ordinario: Se otorga ante un notario.
• Testamento abierto extraordinario: Este es un caso excepcional que permite otorgar el testamento abierto sin la presencia del Notario, pudiendo quedar registrado oralmente o por escrito en caso de peligro de muerte inminente (que exige 5 testigos) o pandemia (con tres testigos mayores de 16 años).
  En caso de que no se produzca el óbito, tras 2 meses, queda sin efecto. Si fallece el testador, quedará sin efecto si después de 3 meses no se acude al Notario y se eleva a escritura pública.

Diferencias entre testamento abierto y cerrado

Las principales diferencias a resaltar entre estas dos modalidades de testamento son las siguientes:

• El testamento abierto notarial se manifiesta palabra por palabra, y el notario recoge las últimas voluntades del testador por escrito.
• El testamento cerrado se entrega al notario sin que este conozca su contenido, normalmente en un sobre, el cual se abrirá tras el fallecimiento del testador.

La principal característica que identifica al testamento abierto es el hecho de que no es secreto.

¿Cuáles son los requisitos para otorgar un testamento abierto?

El notario es el competente para revisar que los siguientes requisitos del testamento abierto se cumplan en forma:

1. El testador deberá ser mayor de 14 años.
2. El notario ha de estar habilitado para redactar la voluntad del testador, en los términos de la Ley del Notariado.
3. Dicho notario debe dar comunicado del acto al Registro General de Actos de última voluntad.
4. En caso de que el testador esté incapacidato, deberán asistir dos médicos para que lo reconozcan y respondan sobre su capacidad de testar.
5. Que el documento cumpla con todas las formalidades documentales exigidas en la Ley de Registros y Notariado.

¿Cómo hacer un testamento abierto?

El primer paso es preparar las voluntades. Es decir, que el testador puede dictar sus voluntades a viva voz ante el notario o llevarlo por escrito.

Posteriormente se debe acudir a notaría. Puede acudir a notaría solo, ya que es posible que exista un testamento abierto sin testigos. Para tal caso es necesaria la presencia de dos testigos, en caso de que no sepa o no pueda firmar. El notario redactará el documento con las formalidades observadas. Leerá en voz alta el testamento y el testador dará su conformidad.

Los trámites siguientes se tratan de protocolización, de los cuales está a cargo el notario, por lo que el testador ya no debe hacer ninguna otra acción.

En caso de que se trate de testamento abierto extraordinario, no será necesario acudir al notario por causas evidentes, pero deberá escribirlo él, preferentemente y serán necesarios cinco testigos para casos de muerte inminente del testador o tres testigos en supuestos de epidemia.

En resumen, el testamento abierto es una herramienta muy útil y ágil que el ordenamiento jurídico pone a nuestra disposición para que podamos asegurarnos en vida el destino que queremos para nuestros bienes y patrimonio una vez que no estemos, y de esta manera garantizar nuestra tranquilidad y la de nuestros seres queridos.

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